COSAS
DE LA VIDA
(1)
Por
Roble
Mediados
de Noviembre, el día parecía calmado, después de haber llovido a
mares. Carlota, decidió hacer limpieza en un armario. Estaba a punto
de iniciar esta labor, cuando sonó el teléfono. Era Dionisia que
con voz estresada, le pedía, si podía ir con ella a comprar los
regalos de navidad. Dionisia, seguía estresada cuando se
encontraron, hablaba de prisa, casi atropelladamente, explicando que
no sabía que regalar a sus suegros, hermanos y sobrinos. Sobretodo,
a su suegra. Se quejaba que el año pasado, su suegra había cambiado
el regalo.
Entramos
en varios comercios, miraba, cogía y dejaba, no se decidía. Le
preguntaba a Carlota que le parecía, esto o aquello. Carlota daba su
opinión, aunque Dionisia no la escuchaba, estaba inmersa en su no
decisión.
Carlota
viendo que la historia iba para largo, decidió llamar a casa, a esta
hora, seguro que su marido habría llegado. Marcos con voz
tranquilizadora, le dijo que no se preocupara, le daría la cena a
los niños. Al final, Dionisia sin mucha convicción, compró un
fular para su suegra.
Mientras
regresaba a casa, Carlota, pensaba que ella se había librado de
todos estos regalos por compromiso. Ella y su marido, habían
decidido hacía tiempo no celebrar las navidades. Los regalos los
hacían en cualquier momento.
Al
abrir la puerta, esbozó una sonrisa al ver las flores que hacía dos
días le había mandado su marido con una nota.
Los
niños al oírla llegar, gritaron: ¡Mamá, estamos aquí, papá nos
está leyendo un cuento! Se unió a ellos y quiso que ese momento se
eternizara.
Fin
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